San Felipe de Jesús

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Colegio Sor Juana Inés de la Cruz  de Monterrey, A.C.

Miércoles 20 de noviembre 2019

“VIDA DE SANTOS”

SAN FELIPE DE JESÚS.-

Su fiesta se celebra el 5 de febrero

Primer Santo Mexicano

 

    Sus padres Don Adolfo de las Casas y Doña Antonia Martínez, españoles que llegaron a la Ciudad de México en 1568 en donde Felipe nació en 1572. Fue el mayor de once hermanos, de los que tres siguieron la vida religiosa.

    Su padre estaba emparentado con otro noble monje y evangelizador de América, Fray Bartolomé de las Casas. Felipe era travieso e inquieto de niño. Estudió gramática en el Colegio de San Pedro  y San Pablo en la ciudad de México, dirigido por los Jesuitas. Mostró interés por la artesanía de la plata. (Por eso, cuando Felipe fue beatificado el gremio de los plateros lo nombró su patrón).

    A los 21 años Felipe se encontraba en las Islas Filipinas, a donde había ido en busca de aventura. Las personas que viajaban a ese lugar, en aquellos tiempos, no lo hacían generalmente por motivos piadosos; ni tampoco predominaba la espiritualidad  en el ambiente de Manila, ciudad conquistada apenas en 1571. En ésta lo común era ver gente ocupada con planes de conquista militar y haciendo planes para el comercio. Ahí decidió Felipe ingresar a la orden de los Franciscanos y escogió el nombre de Felipe de Jesús. Entró al convento de Santa María de los Ángeles de Manila. Un año más tarde, Felipe de Jesús hizo su profesión religiosa. Cuando tres años después se acercaba el tiempo de su ordenación, el 12 de julio de 1596, partió rumbo a México en barco. En Filipinas no se podía ordenar porque no había un obispo. El viaje de Filipinas a América era una aventura peligrosa y el viaje podía durar hasta siete u ocho meses. Durante  la travesía, el  barco en el que iba Felipe estuvo a punto de ser destrozado. Un mes la nave estuvo a la deriva, arrojada por las tempestades de un lado a otro hasta que, destruida y sin gobierno, fue a dar a las costas de Japón.

    En Japón, no les tenían confianza a los misioneros. Cuando ellos llegaron ahí no sabían qué les iba a suceder y así pasaron varios meses. Fray Felipe de Jesús  se refugió en Meaco, donde los franciscanos tenían escuela y hospital. El 30 de diciembre todos los frailes fueron hechos prisioneros junto con un grupo de cristianos japoneses. Comenzó el martirio. El día 3 de enero les cortaron a todos la oreja izquierda. Luego emprendieron una marcha en pleno invierno por un mes, de Tokio a Nagasaki. El 5 de febrero, 26 cristianos fueron colgados de cruces sobre una colina en las afueras  de Nagasaki. Los fijaron a las cruces con argollas de hierro en el cuello, en las manos y en las piernas. Los atravesaron con lanzas. El primero fue Felipe de Jesús. Murió repitiendo el nombre de “Jesús”. Las argollas que debían sostenerle las piernas estaban mal puestas, por lo que el cuerpo resbaló y la argolla que le sujetaba el cuello comenzó a ahogarlo. Le dieron dos lanzadas en el pecho que le abrieron las puertas de la Gloria de Dios.

    Fue beatificado, junto con sus compañeros, el 14 de septiembre de 1627 y canonizado el 8 de julio de 1862.

    Recordemos que el testimonio de los santos confirma el amor de Dios.

    El testimonio de estas personas nos puede ayudar a crecer en nuestra vida espiritual y en nuestra fe.

 

 

“SAN FELIPE DE JESÚS FUE EL PRIMER MÁRTIR MEXICANO”.

 

 

 

 

San Felipe de Jesús, protomártir de México,

que llevaste tu espíritu generoso hasta el

extremo del mundo, enséñanos a medir el valor

exacto de las cosas; que nuestra patria vuelva a su

antigua riqueza espiritual y sea Dios el

Señor de cada vida.

San Felipe de Jesús, que aprendamos de tí

a ser como el mundo  nos necesita.

¡Glorioso Mártir Mexicano,

ruega por tu Patria

y por los que vivimos en ella!

Con Cariño:

Madre María Teresa Silva Sandoval MCM

Directora General.